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Los trastornos del sueño

Entre las consultas más o menos frecuentes que realizan las mamás, están las que atañen al desorden del sueño.

Entre las consultas más o menos frecuentes que realizan las mamás, están las que atañen al desorden del sueño.

¿Cómo se manifiesta esta tendencia?

De diferentes maneras: a veces si son muy chiquitos, los bebés se despiertan naturalmente por hambre y necesidad de contacto, o calor de su mamá.

A medida que crecen y empiezan a incorporar los sólidos, sobre todo después del año, el sueño se va normalizando y empiezan a dormir más horas aún sin necesidad de alimentarse.

Los deambuladores, o los que comienzan a caminar algo más independientes, durante la noche, pueden tolerar mejor esta separación de la mamá.

A veces se producen alteraciones en el dormir que dan cuenta de otras cosas, tales como modificaciones en el ámbito familiar, la llegada de un hermanito, una mudanza, o la vuelta al trabajo de la mamá.

Los bebés son muy sensibles: frecuentemente se angustian porque perciben que algo le pasa a su mamá.

En definitiva, lo que sucede con la alteración del sueño en un niño pequeño es que da cuenta de otras alteraciones en su vida cotidiana que nos resultan difíciles de ver.

Se sugiere, estar atentos, observarlos, tratar de detectar si están cortando un diente o tienen fiebre, o sufren los efectos de una vacuna y/o si pasa algo en el entorno que los perturba.

Gracias a esta atención, podemos acompañarlos, mimarlos y ofrecerles para dormir algún objeto como "el trapito" o sabanita o su juguete preferido.

Esto les permitirá de a poco, ir sintiéndose más seguros y durante la noche tolerar la separación de sus papás.

El sueño del bebé