Una respuesta natural a la constipación

Se conoce como constipación a la evacuación intestinal poco frecuente que se realiza con esfuerzo y que produce heces duras y secas. Si bien desde la medicina tradicional se considera constipada a una persona que realiza sólo tres defecaciones semanales, la medicina natural plantea que realizar una sola evacuación diaria es ya un principio de estreñimiento.

En uno de los fascículos de la colección “La cocina natural de Angelita”, de Ángela Bianculli de Rodríguez, un referente de la cocina naturista en la Argentina, se señala que “mucha gente no sabe que padece esta alteración del ritmo intestinal normal porque cree que una evacuación diaria, y aún menos, es normal. Sin embargo, lo lógico sería que las evacuaciones fuesen tan frecuentes como las comidas que se hacen por día”.

El médico naturista Delio Esteve sostenía que no existe ningún animal con materia fecal en el recto y que sólo el ser humano mantiene un “supositorio” de materia fecal. “Esta es la mayor causa de enfermedad –afirmaba el médico-, porque lo que se absorbe del recto va directamente a la vena hemorroidal, que forma parte de la circulación general. Es decir,  no pasa por el hígado: si se absorben productos de la putrefacción intestinal por el recto no se cuenta con la protección hepática y se intoxica el organismo lo que produce, como mínimo, dolores de cabeza”.

Así, para el naturismo –y para muchos médicos alópatas también-,  la alimentación juega un papel fundamental en el tratamiento de la constipación.

Los alimentos que no se recomienda consumir son: el pan blanco, las pastas, las harinas refinadas, el arroz blanco, el azúcar, el chocolate, la carne el café y el vino, entre otros.
Los recomendados son los cereales integrales y sus derivados incluido el arroz, las frutas frescas, las ensaladas crudas y las hortalizas cocidas.

De este modo, una alimentación equilibrada, con suficiente aporte de fibra, y la actividad física regular son herramientas más efectivas para tratar el estreñimiento.

Y en lugar de los laxantes tradicionales, la medicina natural sugiere tomar en ayunas alguna de las siguientes preparaciones y suspenderla cuando se regularice la función intestinal, para continuar con una dieta sana:

• Dejar en remojo desde la noche anterior una cucharada de salvado con tres ciruelas secas en medio vaso de agua. Comer las ciruelas y el salvado y beber el agua un rato antes de tomar el desayuno.
• Dejar en remojo desde la noche anterior una cucharada de semillas de lino en un vaso de agua. Por la mañana, en ayunas, colar y beber sólo el agua.
• Tomar antes del desayuno una cucharada de aceite de oliva mezclada con el jugo de medio limón.

“Nacemos con el reflejo gastrocólico –afirmaba Esteve-. Cada vez que mama, el bebé ensucia el pañal, pero la vida “civilizada” hace que la persona se abstenga de ir de cuerpo en distintas circunstancias, empezando por el colegio, lo cual lleva a una atrofia de esta función y al estreñimiento”.