Pasar al contenido principal

Moluscos Contagiosos y Verrugas Vulgares

MOLUSCOS CONTAGIOSOS


El molusco contagioso es una infección viral cutánea de curso benigno, generalmente auto-limitada, que se ve habitualmente en niños  pequeños o en edad escolar. Raramente se ven en adolescentes y adultos.


¿Cómo son los moluscos?
Son pequeñas pápulas color piel normal, rosada o blanquecina. Pueden aparecer en cualquier sitio de la piel. En general no afectan palmas y plantas. Nunca afectan órganos internos. No duelen pero en ocasiones se inflaman y pueden picar. Pueden durar varios meses, habitualmente alrededor de un año.
En algunos pacientes, durante la infección, los moluscos se ponen rojos, se hinchan, pican  y supuran, cuando esto ocurre es una buena señal ya que implica que el sistema inmune del paciente los reconoce y está eliminándolos y poco tiempo después la infección desaparecerá.
Son más frecuentes en los niños con dermatitis atópica y eccemas. Tener moluscos  no implica tener fallas en el sistema inmune o bajas defensas.


¿Cómo se contagian?
El virus es muy contagioso y se disemina por contacto directo con la piel de una persona infectada o por compartir con las mismas toallas, ropas o colchonetas. Los hermanos que se bañan juntos o nadan juntos compartiendo tablas y toallas también pueden contagiarse. 
El periodo de incubación es  de 2 a 8 semanas y mientras el paciente tiene moluscos  se auto contagia, especialmente por manipularlos o rascarse y en zonas de contacto natural como pliegues (por ejemplo en la axila se contagian del brazo al tronco o al revés) y van apareciendo de este modo nuevos moluscos hasta que la infección se autolimita, en general en un año.
Los moluscos no son peligrosos. No es necesario que los niños que lo padecen dejen de concurrir a clases por esta razón. Sí es posible que no permitan ingresar a piletas de natación públicas a niños que presentan moluscos para evitar el contagio hacia otros niños.


¿Cómo se diagnostican?
El diagnóstico de la infección es clínico, es decir, se realiza mediante la exploración física del paciente.


¿Cómo se pueden tratar?
Una vez diagnosticados los moluscos contagiosos, por tratarse de una infección benigna no peligrosa y sin síntomas, algunos médicos pueden aconsejar no hacer ningún tratamiento y aguardar a que desaparezcan solos en meses o años.
En los niños con dermatitis atópica es recomendable tratarlos ya que en general aparecen eccemas en la zona de los moluscos y la infección dura más tiempo que en los niños sin dermatitis.
Los tratamientos con cremas o tópicos con ácido salicílico, imiquimod o hidróxido de potasio no son recomendables ya que su efectividad es muy baja o nula y pueden causar severa irritación de la piel y distintos efectos adversos.
El  tratamiento recomendable actualmente en nuestro país es el curetaje de los moluscos. 
Las posibilidades de adquirir la infección pueden ser disminuidas a través de un mantenimiento cutáneo adecuado mediante el uso de emolientes, es decir, sustancias que favorecen la hidratación de la piel. 


¿En qué consiste el curetaje? 
Por este método los moluscos se sacan raspando suavemente la superficie de la piel con una cureta estéril. 
Previamente se coloca una crema anestésica para que el paciente no sienta dolor. La misma se coloca sobre cada molusco y se cubre con un parche, 40 minutos antes de la consulta, así al realizar el procedimiento la piel ya estará anestesiada.
Luego del curetaje la piel se cubre con una gasa durante un par de horas,  el paciente puede hacer vida normal y no requiere cuidados especiales ya que la lesión es muy superficial.


¿Cuánto dura la anestesia?
La anestesia empieza a actuar aproximadamente a los 30 minutos de colocarla con el parche sobre la piel y dura 3 horas en total


¿Pueden aparecer nuevos moluscos después del curetaje?
Si, esto puede ocurrir si hay moluscos incubando que aparecerán unas semanas después, esto ocurre generalmente cuando la consulta para realizar curetaje se hace tardíamente  y la infección ya lleva varios meses de evolución. 

 

VERRUGAS VULGARES


 ¿Qué son las verrugas?
Las verrugas son infecciones virales comunes causadas por el virus papiloma (HPV) que invade las células de la capa más superficial de la piel. Las células infectadas se multiplican muy rápidamente lo que produce una pequeña protuberancia en la piel. . Hay diferentes serotipos de HPV que causan distintas enfermedades. Las verrugas son mucho más comunes en niños que en adultos. El contagio se produce al tocar con la piel lastimada superficies contaminadas con el virus. La tasa de contagio entre convivientes es baja. Uno no debe preocuparse por la posibilidad de contagio al realizar las actividades diarias. Manipular las verrugas  o morderlas facilita el auto-contagio.
Hay distintos tipos de verrugas: vulgares, planas, palmoplantares y anogenitales.
El diagnóstico es, en la mayoría de los casos clínico. No hacen falta estudios complementarios en las lesiones vulgares de la piel habitualmente.


¿Es necesario el tratamiento de las verrugas en niños?
Las verrugas que contraen los niños desaparecerán finalmente luego de unos meses o años. No generan consecuencias negativas si no se hace tratamiento alguno. Sin embargo, debido a que pueden propagarse o extenderse a otras partes del cuerpo o por razones sociales muchos pacientes prefieren hacer tratamiento.
Las verrugas pueden desaparecer sin tratamiento, el 60% se curan solas en dos años.


¿Cómo se tratan?
El tratamiento en general lleva varias semanas o meses hasta lograr la curación, hay varias opciones de tratamiento, en niños las más adecuadas son el ácido salicílico tópico o la criocirugía y/o ambos combinados.


 Tratamiento con ácido salicílico tópico:

  • Por la noche, antes de dormir topicar la verruga con muy poca cantidad de medicación evitando tocar la piel sana normal que rodea la verruga.
  • Aguardar unos minutos a que  la medicación se seque.
  • A la mañana siguiente lavar
  • De día dejar la lesión al aire, es decir sin cinta ni curita. Hacer vida normal.
  • No limar la zona de la verruga ya que puede irritarse fácilmente.
  • La verruga se irá desarmando y cayendo lentamente a lo largo de varias semanas.
  • Hacer el tratamiento hasta que la verruga desaparezca por completo.
  • Si durante el tratamiento la zona tratada se irrita, arde y se pone roja suspender el tratamiento 3 o 4 días y luego reiniciar el mismo.
  • Controlarse con el médico una vez por mes o según su indicación.
Niños Salud del niño Adolescentes Salud en adolescentes